El Bonte 2030 fue bien recibido por los mercados, pero las dudas sobre la continuidad del rumbo económico condicionan su verdadero impacto.
Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el economista, Alejandro Bianchi, quien comentó que, “tanto JP Morgan como Citi tienen para Argentina una recomendación de ‘overweight”. La reciente colocación del Bonde 2030, un bono en pesos pero suscripto en dólares con una tasa del 29,5% anual, fue celebrada por el mercado y logró captar 1.000 millones de dólares, aunque hubo ofertas por 1.700 millones.
“Que Argentina esté dando estos pasos de volver a salir al mercado voluntario de deuda es una señal positiva”, remarcó. Sin embargo, advirtió que la emisión incluyó un «put», una opción de rescate anticipado en caso de cambio de gobierno en 2027, lo cual evidencia una persistente desconfianza de los inversores.
Expectativas de continuidad y tasas futuras
“Si se da una continuidad de las políticas, la inflación bajaría mucho más rápido”, explicó Bianchi, quien destacó que el 29,5% de interés ofrecido está alineado con las expectativas inflacionarias del REM (26,3%). En ese escenario, las tasas podrían bajar hasta el 12%, como en los años ’90, beneficiando fuertemente a los inversores que ingresaron temprano.
“Obviamente en el ex-ante está todo el riesgo eleccionario, que no se sabe cuál va a ser el rumbo final”, advirtió. Para Bianchi, este es el factor clave que aún frena una baja más acelerada del riesgo país, actualmente en 688 puntos.
¿Cuánto falta para llegar al riesgo país deseado?
El Gobierno aspira a reducir el riesgo país a 400 puntos para volver a emitir deuda en dólares, pero Citi estima que el piso razonable sería 550. “La incertidumbre electoral hace que cueste bajar de los 688 puntos”, señaló el economista.
“Argentina es uno de los cinco países del mundo que tienen hoy superávit fiscal”, afirmó, lo que, sumado a una mejora parlamentaria, podría consolidar las reformas estructurales. Entre ellas, mencionó la laboral, previsional y fiscal. “Falta que el público se anime a sacar los dólares del colchón”, apuntó, sugiriendo que esta confianza podría traducirse en mayor inversión real.
¿Qué efecto tiene la suba del dólar?
Respecto a la suba reciente del tipo de cambio oficial (de $1.140 a $1.205), Bianchi relativizó su impacto. “Ha subido muy poquitito y podría bajarlos también. No es algo que preocupe a los inversores externos”, aseguró.
Además, subrayó la sobreoferta del bono: “Se intentaron suscribir 1.700 millones; eso marca que el bono fue visto como una oportunidad”. Según el economista, los fondos más grandes del mundo consideran que el rendimiento cubrirá tanto inflación como variación cambiaria, generando fuertes ganancias si las tasas bajan.
¿Qué tipo de inversor se adapta a la Argentina de hoy?
Para Bianchi, “Argentina ya no paga tasas estratosféricas, pero aún es rentable”. Si bien las acciones y bonos ya no están regalados como en el final del gobierno anterior, aún hay oportunidades.
“Un bono como el AL29 paga un 13% anual en dólares a cinco años. Con perspectivas de crecimiento del 6% este año, sigue siendo atractivo”, explicó. Para inversores más arriesgados, recomendó bonos como el T13-F6, que rinden hasta un 34% en pesos, aunque con riesgo cambiario.
“Hacer carry trade todavía tiene sentido en este contexto”, concluyó, destacando que incluso si el dólar sube al techo de la banda, algunos instrumentos siguen ofreciendo rendimientos positivos.