Los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) implementan nuevas estrategias para detener a los migrantes sin estadía legal en Estados Unidos. Actualmente, se presentan en los tribunales para realizar arrestos, según advierten los expertos.
Los representantes legales de los solicitantes de permisos migratorios advierten que los oficiales extendieron su rango de investigación y realizan redadas a las salidas de las audiencias de inmigración. El objetivo principal son aquellos ciudadanos extranjeros que ingresaron al país a través de la aplicación CBP One y se encuentran en trámite de un proceso por el que deben presentarse ante las autoridades de forma periódica.
Expertos consultados por CNN advirtieron que el ICE utiliza una estrategia silenciosa, que consta en llamar a los migrantes que se someten a los procesos de revisión ante los tribunales para verificar que van a acudir presencialmente e incluso, en algunos casos, les solicitan que lleguen antes de la hora prevista para la cita.
En tanto, una abogada indicó que observó cómo las autoridades judiciales hacían pasar primero a las audiencias a los ciudadanos extranjeros que acudieron físicamente a la corte, en lugar de seguir el orden establecido. Por estos motivos, instan a sus clientes a ser representados por ellos en los encuentros.
El medio mencionado consignó información de documentos oficiales que apuntan al arresto de migrantes que tienen una orden de deportación o que ven desestimados o cancelados sus procesos y solicitudes migratorios.
Estas acciones se enmarcan en el endurecimiento de las políticas implementadas por Donald Trump desde su regreso a la Casa Blanca. Recientemente, un memorando del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) advirtió que también están bajo la mira los extranjeros que no cuenten con documentación legal y no puedan demostrar su presencia en el país durante dos años.
En un comunicado, el organismo gubernamental alegó que las detenciones en los juzgados forman parte del “sentido común”. Asimismo, señaló que se registró un incremento del 413% en las agresiones a los oficiales en estos operativos.
“Esta medida permite conservar valiosos recursos policiales, ya que saben dónde se encuentra un objetivo”, aseveró la subsecretaria de la entidad, Tricia McLaughlin. Y siguió: “Es más seguro para nuestros agentes y la comunidad. Estos inmigrantes ilegales han pasado por los controles de seguridad y se les ha comprobado que no tienen armas”.
Por otra parte, la funcionaria indicó que la secretaria del DHS, Kristi Noem, trabaja con las fuerzas del orden para que “apliquen el sentido común y expulsen a los inmigrantes ilegales delincuentes de las comunidades estadounidenses”.
En este sentido, se conoció recientemente que la administración de Trump pidió a los agentes del ICE que incrementen el objetivo de detenciones diarias a 3000, mientras el promedio inicial se situaba entre 1200 y 1500. El fin es tratar de cumplir con las metas que anunció el presidente republicano de realizar deportaciones masivas de un millón de migrantes al año.