Sobre la calle Serrano de Madrid, en un salón pintado en tonos claros y molduras a la vista, decorado con cuatro tapices gobelinos, el presidente Javier Milei recibió este viernes la escultura que representa el premio Escuela de Salamanca, la distinción que, desde hace cinco años, entrega la asociación liberal El Club de los Viernes.
A sala llena, Milei agradeció el premio repasando su plan económico y cuál era la situación de Argentina cuando asumió: “Estábamos desnudos, bañados y sentados en la silla eléctrica. Y con muchos con ganas de enchufarla”, graficó y despertó sonrisas entre los presentes.
En un discurso con pocas variantes respecto de lo que hace cinco días contó frente a las 7.200 personas que lo escucharon clausurar el Madrid Economic Forum, Milei volvió a hablar de reelección.
“Argentina debe tener cerca de 450 mil millones de dólares de deuda y el equipo de Toto Caputo asumió que si llegáramos a estar en el poder hasta 2031, es decir, que los argentinos en el ’27 decidan acompañarnos, estamos estimando que podríamos estar creciendo a tasas de entre el 6 y el 8 por ciento anual”, dijo Milei en el Salón La Lengua del Centro Riojano de Madrid, un primer piso que suele utilizarse como restaurante. Tiene capacidad para 50 comensales pero este viernes desbordaba de invitados.
Entre las mieles que Milei prometió si vuelve a ganar las próximas elecciones, subrayó: “Todos los años vamos a estar devolviendo un punto y medio del PBI en impuestos. Eso significa que, al finalizar el mandato, estaríamos devolviendo a los argentinos la ligera cantidad de 500 mil millones de dólares”.
Saludos para el gobernador bonaerense
La alusión a Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, surgió dos veces durante la ceremonia en la que Javier Milei recibió el premio.
El primero en mencionarlo fue el profesor Jesús Huerta de Soto, considerado un referente de la Escuela Austríaca de Economía y a quien Milei considera uno de sus mentores académicos.
“El presidente Milei repite una y otra vez que la inflación es un fenómeno monetario a los Kicillof de turno. Es una idea escolástica”, dijo Huerta de Soto, quien recibió en años pasados el mismo premio que este viernes le entregaron a Milei. La última en ser hornada con esta distinción fue la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
El domingo pasado, Díaz Ayuso pasó a saludar al mandatario argentino por el hotel Hyatt en el que se hospeda. El año pasado lo condecoró con la medalla internacional de la Comunidad de Madrid.
La otra mención a Kicillof la hizo el mismo Milei, sin nombrarlo, cuando ironizó acerca de las mediciones de pobreza del Indec.
Lo llamó “soviético comunista de la provincia de Buenos Aires” y señaló que “en un momento eliminó la estadística porque era estigmatizante”.
El cierre del Banco Central
“Hoy no hay que informar nada salvo que ustedes gasten más de 50 mil dólares por mes. De esta manera, hoy los argentinos pueden sacar los dólares fuera de sistema y usarlos libremente y no habrá forma de que la agencia recaudadora los pueda perseguir”, dijo Milei. Y lo aplaudieron.
“Ahora los individuos pueden monetizar la economía cuándo y cómo quieran. Van a poder utilizar libremente el fruto de su trabajo libremente y nadie los va a perseguir”, agregó.
Y compartió sus proyecciones: “Si tenemos en los colchones escondidas diez bases monetarias, cuando todo este proceso haya tomado curso, nos vamos a encontrar con una base monetaria en pesos y el equivalente a once bases monetarias en dólares. Por lo tanto, dolarizar y cerrar el Banco Central va a ser tan fácil como un chasquido de dedos”.
“Si bien durante la campaña prometí la libre elección de moneda, cerrar el Banco Central está a tiro. No he negociado ninguno de mis postulados”, aseguró.
De nuevo, contra la prensa
Sin pudor y con insultos, el presidente volvió a arremeter contra los medios de comunicación. Habló de “lo que genera la mierda de los periodistas” y justificó su rechazo hacia la prensa: “Por eso creo que son seres despreciables, el 90 por ciento”.
“Entre la complicidad de las basuras periodistas y las basuras de la política nos generaron muchísima inestabilidad, nos hizo caer la demanda de dinero, la inflación trepó al 3,7 por ciento mensual”, enumeró el presidente.
Lo escuchaban, en primera fila, el embajador argentino en España, Wenceslao Bunge, y el profesor Jesús Huerta de Soto, quien le dio la bienvenida con una clase de economía que tuvo en el centro el legado de los escolásticos de Salamanca (“La motosierrra también es de origen escolástico. En dos ámbitos: regulatorio y en la reducción del gasto público”, dijo).
Se repartieron ejemplares de La era Milei, el libro de Philipp Bagus y hubo un ramo de rosas rojas y amarillas para Karina Milei, secretaria general de la presidencia.
Antes de entregarle el premio a Milei, Ana Gómez, presidenta de El Club de los Viernes, le dedicó unas palabras. Pidió ser llamada “presidente” (y no “presidenta”) y pronunció su elegía al presidente argentino: “En un mundo que se arrodilla frente a la mediocridad, usted decidió erguirse en pie. Vino a decir lo indecible: que el Estado no es el salvador, que es el saqueador. Usted es un hombre que no necesita que lo aprueben sino que lo entiendan”, dijo Gómez.
Sin referencias a Pedro Sánchez
Milei volvió a España esta madrugada de viernes. El gobierno de Pedro Sánchez le habilitó el aeropuerto de Torrejón de Ardoz, la antigua base militar que utilizan la Corona y los miembros del gobierno para realizar viajes al exterior.
Sin agenda oficial con funcionarios ni ministros del gobierno de coalición de izquierdas español, el presidente argentino no aludió, esta vez, a Sánchez ni a la crítica situación política que atraviesa.
Un informe de la Guardia Civil reveló una red de cobro de coimas en la adjudicación de obras públicas en distintos lugares de España en la que figura el secretario de organización del PSOE que preside Sánchez. El jefe del gobierno español ya estaba cercado por otras investigaciones a un ex ministro suyo. La oposición le pide que convoque nuevas elecciones pero Pedro Sánchez resiste. Por ahora.
Milei estuvo en Madrid el domingo pasado, donde cerró un foro económico privado. Desde el escenario vociferó ¡”Muerte al socialismo!” y mostró complicidad con quienes, desde las gradas, insultaban a Pedro Sánchez: invitó a seguir “dando zurra al bandido local”.
Madrid es la última escala de la gira más ambiciosa que encaró Javier Milei desde que asumió. El sábado por la mañana se reunirá con empresarios españoles en la residencia del embajador argentino en España. Luego de ese desayuno de trabajo, el presidente regresará a Argentina.