Niebla… Mucha niebla durante la mañana se prevé para este sábado, y algo de nubosidad pero sin precipitaciones a la vista, por el momento. Eso sí: la primavera parece seguir imperando en este raro invierno porteño, que después del frío que calaba los huesos dio paso a temperaturas máximas bastante agradables.
En concreto, las siguientes horas siguen con aire del Norte ingresando a la Ciudad y al conurbano, una brisa apenas perceptible que no logrará disipar la neblina que se instalará durante la madrugada y perdurará hasta bien entrada la mañana.
El cielo estará parcialmente nublado durante la tarde, pero las nubles se irán disipando con el transcurrir de las horas, esperándose cielo prácticamente despejado hacia la noche sabatina. Los registros térmicos irán desde los 11° hasta los 19° de máxima.
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Como se anticipó, el domingo será un día casi primaveral, ideal para realizar actividades de todo tipo al aire libre: el cielo estará completamente despejado y las temperaturas llegarán a unos agradables 19°.
Cómo seguirá el clima durante la próxima semana
La semana próxima arrancará con registros térmicos idénticos a las jornadas precedentes: mínima de 11° y máxima de 19°. Por la mañana estará nuevamente la niebla y aumentará la nubosidad, gracias al aire que soplará suavemente desde el sector Noreste.
Para el martes se prevé una leve suba de la temperatura máxima, que llegará a los 20°, y un fuerte aumento de la nubosidad sobre la región más poblada del país, debido al viento que soplará desde el Este, anticipando precipitaciones que amenazarán en el horizonte.
En efecto, las lluvias llegarán a la Ciudad y el conurbano durante el miércoles 16 de julio, al menos con un 40 por ciento de probabilidad de tormentas aisladas. Además, el viento soplará con algo de intensidad desde el Sudeste y los registros térmicos comenzarán a descender, aunque nada para desesperarse.
Como el descenso de la máxima, que alcanzará los 16° durante el jueves 17, también llegará un sensible mejoramiento de las condiciones meteorológicas para esa jornada: cielo prácticamente despejado y poco más de qué preocuparse.
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