Con tan solo 17 años, Gastón Díaz, alumno del último año de secundaria en el Instituto Santa Faz de Lanús, es considerado uno de los mejores estudiantes del mundo tras quedar entre los 10 finalistas del Chegg.org Global Student Prize 2025, entre casi 11.000 nominaciones y postulaciones provenientes de 148 países.
En diálogo con LN+, el joven estudiante, el único latinoamericano en llegar al top 10 de ese premio, compartió sus pasiones, hobbies, lecturas y proyectos, e incluso contagió su actitud curiosa e indagadora.
“Tengo la meta de aprender algo nuevo todos los días. Me encanta el concepto de ser una máquina de aprender. Tengo muchos amigos en el cole y siempre charlamos. Yo tengo otros objetivos: llegar a lo más alto posible. Me encanta desarrollar soluciones con tecnología, es algo que me divierte mucho y creo que se puede hacer un impacto”, manifestó Gastón, fundador de Cresify, una herramienta de marketing, reconocida por Microsoft for Startups, que ayuda a las empresas a optimizar sus procesos de venta.
En ese sentido, transmitió su deseo de convertirse en un emprendedor influyente. “De alto impacto, como (Marcos) Galperin”. “Estoy aplicando a las universidades de Estados Unidos. Me encanta Stanford por toda la cultura de Silicon Valley. En dos meses decidirán si me aceptan. Pero también estoy aplicando en universidades de acá como plan B”, remarcó.
Consultado por su formación, contó que su padres y los profesores del colegio han sido desde la infancia promotores de una educación de excelencia.
“Mis padres me ayudaron un montón, particularmente mi madre. Me enseñaron a nunca conformarme con lo que sé, sino siempre apuntar a lo más alto posible, me fomentaron que lea, que practique matemáticas”.
Gastón Díaz, asimismo, sostuvo que deben emprenderse reformas para mejorar la situación actual del país, sobre todo en la educación:
“Deberíamos de ir a un sistema donde la currícula sea personalizada y la defina cada escuela. Es de hace más de 1500 años que los estados definan las currículas. El conocimiento significa estar en la punta de la silla, significa oxígeno al conocimiento. El conocimiento no viene de un vértice, viene de cosas separadas”.
El adolescente también dijo que practica deportes para “despejarse” y lee mucho.
“Me gusta leer biografías de emprendedores, de científicos. También me gusta leer mucho sobre las ideas de la libertad, economistas liberales. Suelo leer casi todo en inglés para subir el nivel”.
Sobre el final de la entrevista, confió su futuro deseado: “En cinco años me veo terminado mis estudios y emprendiendo un tipo de start up”.